Hay zonas de nuestro cuerpo que son mucho más sensibles que otras, un ejemplo de ello son el cuello y el escote. Por esta razón estas dos zonas merecen un cuidado especial. ¿Cómo cuidar tu cuello y escote? Sigue leyendo.
Ambas zonas están constantemente expuestas al sol, al frío, a la suciedad de la calle, entre otras cosa, es por ello que solemos ver como se resienten con más facilidad. Por ejemplo: Si salimos a la calle, nuestro cuello siempre termina bronceado, al igual que sucede con el escote.
Las mujeres por lo general buscan cuidar de su piel con mucho más detalle que la gran mayoría de los hombres, ya que eso ralentizará la aparición de arrugas en el rostro y el cuello, que son zonas en las que se hacen notar bastante.
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¿A qué se debe la sensibilidad de estas zonas?
Es bien sabido que las zonas del cuello, escote y rostro son zonas de mucha delicadeza y es por eso que hay que mantenerlas siempre bien cuidadas. Sin embargo, ¿cuál es la razón de esto?
Menor cantidad de Glándulas Sebáceas
Primero que nada, la sensibilidad de estas zonas se debe a que hay menos glándulas sebáceas en esta parte del cuerpo que en otras. Estas se encargan de llevar a cabo el proceso de lubricación de la piel.
Las glándulas sebáceas, tal cual como lo dice su nombre, genera sebo que es lo que lubrica nuestra piel.
Entonces, al tener menos lubricación la zona de la piel se ve más afectada en las altas temperaturas y cuando se encuentra expuesta al sol, ya que se reseca con mucha más facilidad que cualquier otra parte de la piel.
Menor cantidad de Colágeno
Por otro lado, esta zona también carece de colágeno en comparación a otras zonas del cuerpo. El colágeno es una proteína que nos ayuda a mantener funcionado ciertos procesos dentro del cuerpo. De hecho, nuestro cuerpo está lleno de esta proteína siendo alrededor del 6-7% de las proteínas dentro del cuerpo humano.
El colágeno tiene la función de unir tejidos en todo el cuerpo, cosa que lo hace bastante importante para el mismo. Une tendones, músculos, ligamentos, piel, entre otros.
Lo más importante a tomar en cuenta aquí es nuestra piel, si estamos en una zona en la que no se produce esta proteína de forma constante, la misma no se encuentra unida de la misma forma que otras zonas del cuerpo, siendo esta una de las razones por su sensibilidad.
Menor densidad de fibras conjuntivas
Este punto va muy relacionado con la parte del colágeno, ya que las fibras conjuntivas realizan un trabajo similar al del colágeno. Las fibras conjuntivas son los tejidos conjuntivos corporales que se dividen en tres tipos: fibras colágenas, fibras reticulares y fibras elásticas.
Todas estas fibras se encargan de cosas diferentes, pero el trabajo principal del tejido conjuntivo es conectar y soportar todos los demás tejidos dentro del cuerpo, ¿bastante importante, cierto?
El hecho de que el cuello y el escote sean más sensibles se relaciona directamente con esta situación, ya que a menor cantidad de tejidos que sostienen la piel, pues la misma será mucho más frágil y sensible.
Consejos para cuidar tu cuello y escote
Existen diferentes tipos de cuidados que podemos agregar a nuestra rutina para asegurar que la piel del cuello, del escote y del rostro se encuentren sanas y se ven atractivas.
A continuación te dejamos algunas recomendaciones:
Asistir a un día de spa o a una estética
Existen diferentes tipos de tratamiento que pueden ofrecerse en un centro de belleza para cuidar ambas zonas. Por ejemplo, debido a las razones mencionadas anteriormente el cuello y el escote son zonas que sufren de la aparición de manchas gracias a la exposición al sol.
Mientras más tiempo pasen expuestas y tu te mantengas con manchas de días pasados, las mismas se harán más oscuras y se volverá una necesidad asistir a tratamientos que las eliminen o que las aclaren al menos un poco. Si dejamos manchar estas zonas, suelen verse más envejecidas de lo que realmente son.
En nuestro centro de Palma de Mallorca, no solo tendrás la oportunidad de aplicar estos tratamientos sino que también te puedes apuntar para otro tipo de cuidados como hidrataciones y humectaciones del rostro y otras zonas.
La hidratación lo es todo
Existen muchas maneras de hidratar nuestra piel, desde los alimentos hasta cuidados externos como cremas y sérums. En las épocas de fiesta, recomendamos el uso de todos ellos.
Todos los días, dos veces al día debemos hidratar nuestra piel con los productos de nuestra preferencia.
Al despertar debemos lavar bien el cuello y el rostro y aplicar la misma crema a ambas zonas; en el escote se puede aplicar las mismas cremas. Luego, en la noche antes de acostarnos a dormir repetiremos el procedimiento, recordando hacer una limpieza profunda a esta hora, ya que debemos eliminar la suciedad que se ha pegado al cuerpo a lo largo del día.
Sin embargo, la hidratación no termina allí, la misma también es importante asegurarla a través de una buena alimentación e ingesta de líquidos. Asegúrate de tomar un mínimo de ocho vasos de agua diarios para mantener tu piel sana, hidratada y ayudar a tu cuerpo a funcionar correctamente.
¡Cuidado con lo que comes!
La alimentación sobre todo en las fechas de fiestas no suele ser la mejor. De hecho se caracteriza por acompañarse por muchos dulces, grasas y alcohol de diversos tipos.
Tu piel resentirá todas estas cosas y no dudará en mostrarse menos sana si estás abusando del consumo de estas sustancias. Asegúrate de que comes de forma moderada, no te pediremos que te saltes un sabroso pastel, ¡pero tampoco abuses!
Intenta ingerir comida sana mientras no estés celebrando, acompaña la mayoría de tu dieta con algunas frutas, comidas bajas en grasa y evita comer muchos dulces todos los días, de esta manera podrás cuidar de tu piel mientras mantienes tu figura.
Ya sabes algunos excelentes tips y recomendaciones para cuidar tu cuello y escote.
Disfruta de todo lo que la vida tiene para ofrecerte sin dejar de lado a tu salud. Además, no olvides contactarnos si deseas pedir cita para uno de los tratamientos de limpieza o eliminación de manchas, estaremos gustosos de atenderte.
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